Sin entrar en el (ya cansado y nunca cerrado) debate «¿qué es un UXer)» vs «¿qué es un diseñador de producto?» me gustaría compartir mi visión de lo que hace un buen diseñador – de cualquier tipo y para cualquier medio.
#1 Es capaz de poder mirar su trabajo desde fuera y tener empatía.
Si somos los únicos usuarios de lo que diseñamos, entonces la empatía es algo natural y no hace falta mirar nuestros diseños con «otros ojos». Sabemos todo acerca de nosotros mismos, ya sea consciente o inconscientemente.
Sin embargo, es increíblemente difícil conocer y entender de verdad a los demás. Sobre todo cuando te dicen una cosa (por ejemplo, en un test de usuarios) y hacen lo contrario (por ejemplo, con la tarjeta de crédito en la mano, solos en su casa enfrente de la pantalla de su ordenador, en el medio de un proceso de compra).
La capacidad de ponernos en el lugar de otros (tanto nuestros usuarios como nuestros clientes) lleva mucha práctica y esfuerzo. Pero cuando, a pesar de amar el diseño que has hecho, eres capaz de ver los fallos, las posibilidades, y sobre todo, ver tu diseño con los ojos de tu audiencia, ese es el momento en el que podrás realmente innovar, crecer.
Cosas que nos ayudan con este reto:
- pasar mucho tiempo con usuarios
- tomar parte de sesiones de critique (y no criticas del palo «eso no me gusta») donde las opiniones vengan bien fundamentadas
- escuchar atentamente a estas opiniones y si no hay fundamento, pedirlo.
#2: Poder (y querer) medir nuestro éxito
Un diseño molón queda muy bonito en un portfolio. Tener muchos seguidores y comentarios positivos en Dribbble o LinkedIn mola mogollón. Premios de diseño son anecdóticamente interesantes. Pero lo que realmente cuenta es un diseño que cumpla (o mejor aún, supere) objetivos cuantificables y que además le haga la vida mejor al usuario.
Nuestro trabajo no acaba con entregar un diseño, unas specs, un flow al developer, al cliente, a nuestro jefe. Nuestro trabajo en realidad no debería acabar nunca. Porque una vez que ya hemos «cumplido con nuestra parte», no sabremos si lo hemos hecho bien hasta que no sepamos si funcionó – más allá de un cliente o jefe satisfecho. Para eso, junto con el brief creativo, tenemos que exigir indicadores de éxito -cómo se va a medir.
Claro está, soy totalmente consciente que no siempre es posible, porque muchas veces nos pagan por «entregar», pasamos al siguiente proyecto mientras alguien más construye (o cambia) lo que hemos diseñado, y nunca nos enteramos de qué realmente pasó con nuestro trabajo.
(NB: Por esto me está gustando tanto esto de estar «in house», donde no sólo puedo, sino que debo seguir y medir cada proyecto hasta la publicación – o el roll-back, medir, analizar y volver a optimizar una y otra vez).
Medir no sólo nos dice si lo hemos hecho bien. Nos permite aprender de nuestros fracasos y mejorar.
#3: Tener una curiosidad insaciable
Un buen diseñador nunca deja de preguntar ¿por qué?.
- Pregunta a los usuarios, a su cliente, a sí mismo.
- Cuestiona las razones, las motivaciones, los hábitos.
- Cuestiona las herramientas y las técnicas.
- Cuestiona comentarios y opiniones, metodologías y procesos.
- Cuestiona a los gurús y las verdades absolutas.
La curiosidad puede dar paso a insatisfacción, y eso es bueno porque un diseñador satisfecho es un diseñador incapaz de superarse, de reinventarse, de innovar.
#4: Es tan analítico como visceral
La intuición es, en mi experiencia, nada más una reacción del cerebro poniendo a nuestra disposición una solución fruto de todo lo aprendido, habiendo sido filtrado, evaluado, procesado y organizado en una fracción de segundo.
Un buen diseño es como la buena cocina. La receta paso a paso es buena y necesaria para los principiantes pero la experiencia nos enseña que «una pizca de esto, un puñado de lo otro y al fuego hasta que tenga la consistencia adecuada» es de donde salen los mejores platos (y diseños)
Pero antes de tener una buena intuición, el buen cocinero (y el buen diseñador) ha mirado, analizado, probado, errado, aprendido.
Y cuando nos enfrentamos a un problema complejo, la intuición es poco más que una hipótesis que debemos deconstruir y evaluar conociendo todas las implicaciones.
Un buen diseñador no sólo tiene «intuición». También sabe navegar datos para encontrar pistas para informar el diseño. Sabe analizar datos para medir el éxito. Y sabe «leer» a sus usuarios y sus clientes, y analizar y entender lo que no saben cómo expresar.
#5 Piensa en 360
Un buen diseñador considera y evalúa no sólo lo obvio, pero también el contexto y todas las implicaciones posibles y tiene un enfoque totalmente «transversal», uniendo y atando cabos, asegurando consistencia con otros diseños o piezas del sistema, rompiendo silos.
De hecho, un buen diseñador tiende a pensar en ciclos, procesos, fases y sistemas además de los aspectos estéticos.
El buen diseñador considera desde implicaciones técnicas hasta el probable estado de ánimo del usuario, las expectativas, hábitos y motivaciones.
Y siempre, siempre piensa a medio plazo aunque ejecute a corto plazo. Toma en cuenta potenciales variaciones, expansiones o añadidos al diseño y así evita que lo haga sea obsoleto a la primera modificación.
Podría seguir un buen rato, pero de momento me quedo con esto.
No hablé ni voy a hablar de habilidades con un lápiz, Figma, Photoshop o HMTL. Porque eso se aprende fácilmente. Cualquiera puede aprender cómo usar una herramienta pero, desde mi punto de vista, lo que realmente importa es lo demás – la manera de ver, pensar, de actuar.
Nuestro trabajo como diseñadores no comienza ni acaba con una entrega. Es un estado perpetuo expresado con cada cosa que hacemos, y cómo lo hacemos.
¿Y tú qué opinas?
6 comentarios en “Retrato de un buen diseñador «UX» (de producto)”
Con tu permiso, voy a permitirme una analogía entre UXer e Ingeniero basándome en la definición de este último según Aquiles Gay: «Un ingeniero es una persona que partiendo de sus conocimientos, ideas, recursos y medios a su disposición, crea o construye soluciones con el objetivo de mejorar la calidad de vida del ser humano». Las cualidades que debería tener un buen ingeniero no parecen muy diferentes a las que propones aquí para en «buen UXer», ¿no crees?
Muy muy interesante la analogía. De hecho, un ingeniero es un diseñador también – sea cualquier sea la rama. Gracias por aportar 🙂
Una sugerencia como #6 Resiliencia: para lograr un éxito es probable que sean necesarios 10 fracasos, el UXer tiene que conocer esto y ser capaz de recuperarse de esos fracasos (aprendiendo de ellos) así como la humildad de reconocer esos fracasos.
Totalmente de acuerdo!
In line with #3 and #5, UX, like its academic foundation HCI, is about interdisciplinarity – and the mediation between them.
Hola,
estaría interesado en hacer un curso o master en UX,realmente no se mucho sobre el tema, no se si podrías mandarme algún link o aconsejarme algún libro. Me ha gustado mucho lo que has dicho, así que creo que eres la persona correcta a la cual poderselo preguntar. Respecto al master, yo ahora vivo en Barcelona, pero si sabes de algún curso en inglaterra, me iría bien igual visto que tengo pensado ir una temporada allí para aprender el inglés.
Muchas gracias